Santiago Giorgini sufrió un incendio en su casa y se salvó de milagro
A través de las redes sociales, el cocinero de La Peña de Morfi y su pareja contaron el dramático y angustiante momento que vivieron.
Santiago Giorgini, y su pareja, Juli León, vivieron una dramática situación el fin de semana, y lo contaron a través de sus redes sociales. El chef de "La Peña de Morfi" (Telefe) se encontraba durmiendo la siesta el domingo pasado, cuando el olor a humo y los gritos de sus vecinos lo despertaron, porque se estaba incendiando el lavadero de su casa.
Juli León describió en Instagram la situación. "¡Estamos sanos y salvos! ¡Estamos vivos! Jamás imaginé que alguna vez tendría que escribir algo así. A la tardecita el motor del secarropas se quemó, empezó a prenderse fuego y siguió propagándose; nosotros dormíamos la siesta", comenzó.
"Las chicas por suerte no estaban (haciendo referencia a sus hijas), los vecinos gritaban y no escuchábamos nada. Santi de pronto se despertó aturdido, bajó, yo lo seguí. Todo era humo. No veíamos nada. Busqué a Tita (mascota). Por suerte la encontré y estaba bien, pero fue una pesadilla de esas de las que una se levanta empapada en sudor", agregó León. El posteo fue replicado por el reconocido cocinero en su cuenta de Instagram.
También destacó que el jefe de bomberos que los asistió les dijo que había sido "una especie de milagro" y que habían tenido mucha suerte de despertarse antes de que fuera demasiado tarde.
"Yo creo que mis suegros y mi papá tuvieron mucho que ver, tenemos tres Ángeles de la guarda, lo sé. Estamos seguros de algo, que si nos preguntaran: ¿Qué salvarías de tu casa en un incendio?, contestaríamos: Nada de nada, solo nosotros", continuó.
"La vida es un regalo precioso. Gracias Universo por dejarnos seguir acá. Y gracias a los mejores vecinos del mundo... ¡los nuestros! A todos los que se movilizaron enseguida para rescatarnos. Nos esperan semanas complicadas. La casa quedó inhabitada por el hollín. Seguimos muy movilizados, conmovidos y agradecidos", siguió.
"Tantos, pero tantos mensajes contando que también se van a dormir o a trabajar dejando lavarropas, secarropas y lavavajillas funcionando. Era un secarropas, pero podría haber sido cualquier otro artefacto. Repitamos juntos: Nunca más voy a dejar artefactos en funcionamiento si no estoy cerca para poder controlarlos", concluyó León reflexiva y agradecida, en su cuenta de Instagram.