Algunas curiosidades de Rezo Por Vos, el himno de Charly García y Spinetta
Es uno de los temas más conocidos y populares del rock argentino. Y tiene una historia que la hace épica.
En la historia del rock argentino, hay canciones que son himnos generacionales. Y después están aquellas que, además, nacen con el aura del mito. "Rezo por vos", compuesta por Charly García y Luis Alberto Spinetta en una sola noche de diciembre de 1985, es una de esas obras únicas, atravesada por la genialidad, la tragedia y la magia.
Todo ocurrió en una jornada tan caótica como inspiradora. Charly había invitado a Spinetta a su departamento de Coronel Díaz con la idea de trabajar juntos en un disco completo, un proyecto que ambos bautizaron Tango. Pero ese álbum nunca llegó a ver la luz: diferencias personales, desinteligencias creativas y el temperamento volcánico de García hicieron que quedara trunco. El único fruto de esa unión fue Rezo por vos, una canción nacida bajo una lluvia torrencial, en medio de cables, sintetizadores y humo de cigarrillos.
La leyenda dice que, mientras componían el tema, se desató un incendio en el departamento de Charly. Las llamas lo consumieron todo. En ese contexto, la letra cobró un peso emocional inusitado. "Y en el dolor, el que escribe paga" no era solo una metáfora, sino una verdad literal. La destrucción material coincidió con un momento de revelación artística. El fuego, en vez de detenerlos, fue motor creativo.
Aunque el tema se volvió popular por la versión incluida en Parte de la religión (1987), Spinetta no se quedó atrás. La grabó por su cuenta en su álbum Privé con un tono más introspectivo, más cercano a lo espiritual que a lo terrenal. La misma canción, dos almas. Dos visiones que conviven en un mismo universo.
Pero Rezo por vos no fue solo una catarsis personal. En un país que apenas salía de la oscuridad de la dictadura, con heridas abiertas y una democracia en pañales, la letra fue leída también como un rezo colectivo. Una súplica por el otro, por el país, por los que ya no estaban. Era el rock hablando desde el dolor, pero también desde la esperanza.
Casi cuatro décadas después, la canción sigue vigente. No solo por su melodía potente o su letra intensa, sino porque guarda la historia de dos próceres del rock nacional que, por una noche, se unieron para escribir una página eterna de nuestra música.