Polémicas declaraciones de la Cecilia Narova, la villana de la serie de Cris Miró
La bailarina, que dejó la obra cuando fue desplazada por Cris Miró, habló sobre la serie y del personaje que interpreta Adabel Guerrero.
El fenómeno de Cris Miró, la primera vedette trans del teatro porteño, ha tomado impulso desde su debut. La serie, dirigida por Martín Vatenberg y Javier Van de Couter, basada en "Hembra" de Carlos Sanzol, deslumbra con una vida digna de la gran pantalla.
Con 8 episodios de 30 minutos, la trama explora la trayectoria artística y personal de Cris Miró, desde sus inicios hasta momentos cruciales como su diagnóstico e internación.
Sin embargo, la narrativa deja cabos sueltos, como la identidad de la vedette que rechazó trabajar con Cris, un misterio que se insinúa en el libro. El conflicto entre Cecilia Narova, en la serie Griselda Lamas (Adabel Guerrero en la serie) y Cris Miró estuvo marcado por renuncias y disputas y reveló las tensiones en el mundo del espectáculo. Narova, elogiada pero eclipsada por la creciente fama de Cris, se retiró en medio de rumores y especulaciones.
En una reciente entrevista Narova, la vedette que triunfó en Estados Unidos, se mostró indignada por la serie y siguió minimizando la figura de Cris Miró, a mas de 25 años de la obra que las distanció y hasta tuvo un comentario transfóbico.
"(Lino Patalano) no me dijo que iba a estar Cris Miró. Ya firmado el contrato, me entero de que sería una atracción, pero después empiezo a ver que tenía mejores cuadros que el mío. Recuerdo que me habían puesto una escalerita de cinco escalones con una capita de encaje rojo y cuatro patovicas desnudos que la gente miraba más que a mí y Cris (Miró) aparecía volando. No la pasé muy bien", admitió en diálogo con La Nación.
Y cerró con un comentario transfóbico. "Nos llevábamos bien porque era un tipo bien, buenazo, pobre. Lo usaban", dijo. "Te referís a Cris Miró en masculino", notó el periodista. "Es que era un hombre, no tenía ovarios, es la verdad", sentenció, remarcando que Lino quiso hacerlas pelear por prensa, pero ella se negó y renunció a la revista.